Cómo conseguí trabajo en Ámsterdam

Thumbnail

Por: Lucas Rollan

Antes de emigrar a los Países Bajos conseguí trabajo desde Argentina. Para asegurarme de conseguir un contrato, no dejé ningún detalle librado al azar. En mi caso, sin ciudadanía europea necesitaba una visa de trabajo. Por eso pasé varios meses hablando con mucha gente diferente, teniendo entrevistas de trabajo muy interesantes y viajando mucho.

Si te estás preguntando cómo conseguir trabajo en Europa, conoces a alguien que se esté preguntando si es difícil conseguir trabajo en Ámsterdam o quiera saber cómo conseguir trabajo en otro país, escribí este artículo para contarte mi experiencia en el proceso.

Tabla de Contenido

  • Primeros pasos
  • Buscando trabajo online
  • Contacto con las compañías
  • Preparación para las entrevistas
  • Entrevistas online
  • Entrevistas en persona
  • Ofertas de trabajo

Primeros pasos

Después de 4 años trabajando para la misma compañía como desarrollador Front-End, mi curriculum vitae estaba desactualizado. Así que cuando decidí empezar a buscar trabajo, una de las primeras cosas que hice fue actualizar mi hoja de vida y redes sociales profesionales. No solamente la presentación necesitaba un poco de amor, también mi perfil laboral había cambiado desde la última vez que busqué trabajo. Así que decidí rehacerlo completamente.

Desde hace varios años tengo dos versiones de mi CV, una en español y una en inglés. En este caso por primera vez terminé primero la versión en inglés y después hice la traducción, para asegurarme que la versión más internacional estuviera lo mejor posible.

Estas son algunas cosas que tuve en cuenta para actualizar mi perfil laboral:

  • Asegurarme que las palabras claves de mi biografía reflejaran la experiencia que gané en esos últimos cuatro años
  • Remarcar las aptitudes que coincidían mejor con el puesto que estaba buscando y eliminar las que no estaban relacionadas
  • Resaltar los logros más interesantes y quitar detalles menos relevantes
También me aseguré que el CV se viera perfecto en formato PDF, y hasta lo imprimí para revisar que se vea bien en papel

Buscando trabajo online

Cuando empecé a buscar puestos de trabajo en Europa a los cuales aplicar, primero tuve en cuenta algunos puntos muy importantes para mi situación particular:

  • Que la empresa estuviera habilitada y dispuesta a tramitar una visa de trabajo para mí, y de residencia para mi familia. Los empleadores habilitados para solictar visas están listados en el registro público de espónsors reconocidos (en inglés), para la mayoría de los trabajos la opción a usar es «Regular Labour and Highly Skilled Migrants».
  • Que la oferta incluyera un buen paquete de relocación, que cubriera el costo de la mudanza y los pasajes de avión.
  • Que el salario sea suficiente para vivir sin dificultades en la misma ciudad donde fuera el trabajo.

Para la búsqueda usé dos canales. El primero y dónde pasé más tiempo fue internet, principalmente en LinkedIn, que sería la opción más útil para la mayoría. Pero también es útil buscar en sitios específicos de tu profesión, como foros o sitios de preguntas y respuestas. En mi caso apliqué a varios puestos de trabajo que encontré en StackOverflow y GitHub. Una herramienta clave para mí fue Glassdoor, un sitio que permite ver comentarios de empleados actuales y ex-empleados sobre la compañía en la que trabajan, que es muy útil para entender los problemas que tienen y decidir si realmente aplicar a algún puesto.
El segundo canal fueron mis contactos. Colegas, ex-colegas, conocidos, cualquiera que me pudiera ayudar a encontrar una posición disponible o tuviera información que me pudiera ayudar. Al final, ésta fue la forma en la que conseguí trabajo, un ex-compañero de Argentina me refirió para un puesto en la empresa donde trabaja.

Contacto con las compañías

Una vez que apliqué a unos 20 puestos en el transcurso de dos semanas, empezaron a llegar las respuestas de las empresas. Traté de hablar con tantas como pude, y agendé algunas entrevistas por videollamada. Esas conversaciones suelen ser casuales, pero son muy importantes. En esos momentos intentaba averiguar si la empresa era lo que yo buscaba, y la persona del otro lado hacía preguntas para decidir si yo tenía el perfil correcto para seguir en el proceso de selección de personal.
Una pregunta que me hicieron en todas esas entrevistas fue cuál era mi sueldo pretendido y si estaba dispuesto a decir cuánto era mi sueldo en Argentina. Para la remuneración pretendida mencionaba el salario habitual para mi puesto en la ciudad donde había aplicado -mayormente lo tomé de Glassdoor– y que mi sueldo en mi país no era relevante porque la economía argentina no tiene comparación con la europea.
Mis preguntas pasaban mayormente por los temas que mencioné en el punto anterior: la visa y el paquete de relocación.
Para el final de esta etapa, tenía agendadas entrevistas técnicas con tres compañías europeas en dos ciudades. En Estocolmo una financiera, en Ámsterdam una pequeña empresa y una multinacional. Las tres me pidieron completar algún tipo de prueba online antes de seguir adelante, para verificar que tenía los conocimientos mínimos para invertir tiempo en entrevistarme.

En esta etapa es muy importante tratar de decidir qué posibles empleadores descartar para evitar perder tiempo en entrevistas.

Preparación para las entrevistas

Desde el momento en que decidí que iba a buscar empleo, armé una lista de temas generales que necesitaba repasar y le dediqué tiempo a leer y ponerme al día con las últimas novedades en mi ámbito profesional.
Cuando las entrevistas estuvieron agendadas hice tres listas nuevas para estudiar, una para cada posible empleador. Busque información en internet sobre cada empresa, tratando de entender sus perfiles y anticiparme a qué temas iban a surgir en el proceso de cada una.

Para la multinacional:

  • Encontré que en Glassdoor había opiniones y descripciones de las entrevistas dejadas por candidatos de mi mismo puesto, detallando qué preguntas les hicieron y si el resultado fue positivo o negativo.
  • En este caso el perfil que buscaban era una persona que pueda hacer cualquier trabajo que le toque entre los muchísimos departamentos que tiene la empresa.
  • La lista de temas para estas entrevistas era mayormente para reforzar las bases teóricas del desarrollo de software en general.

Para la financiera en Estocolmo:

  • Tuve que comparar con otras financieras más grandes para entender qué perfil buscaban.
  • El perfil para ellos era una persona que pudiera asegurarse de que los pagos siguieran fluyendo en todo momento y pudiera solucionar cualquier problema rápidamente.
  • La lista de temas para estas entrevistas estaba enfocada en infraestructura y mantener un sistema funcionando sin interrupciones.

Para la pequeña empresa en Ámsterdam:

  • No había casi información sobre ellos, así que me basé principalmente en su página corporativa.
  • Ellos buscaban a alguien que pueda seguir construyendo su producto, enfocado a una única línea de negocios.
  • Para esta empresa mi lista tenía temas enteramente prácticos, técnicas y herramientas. Además estudié a fondo el manual y los tutoriales de su único producto para entender exactamente de qué se trata y cómo funciona.

Entrevistas online

Como yo estaba en Argentina, las tres compañías me entrevistaron a distancia por videollamada. Después de haber entrevistado yo mismo a muchas personas de esta manera, sabía que había que cuidar algunos detalles importantes. Para que estas entrevistas funcionen, a toda la preparación anterior también le sumé:

  • Buena iluminacíon: por la diferencia horaria con Europa, tuve algunas entrevistas a horarios poco comunes, algunas sin luz del sol. Por eso conseguí una lámpara y probé varias ubicaciones hasta que encontré una que funcionaba y usé un biombo para evitar que entre demasiada luz durante el día.
  • Buen audio: tener auriculares es casi requerido. Los parlantes normalmente son más difíciles de escuchar y generan eco, que es molesto para la persona del otro lado.
  • Buena conexión: en mi caso decidí conectarme por cable en lugar de usar Wi-Fi. Si la conexión es mala y se entrecorta la conversación, no sólo es incómodo para el entrevistador, también pone estrés en el entrevistado.
  • Tener agua cerca: es importante mantener la mente hidratada, pero también entre los nervios y la luz, la sed aparece seguro. También tomar agua es una buena excusa para hacer una pequeña pausa para pensar cuando te hacen una pregunta difícil.

Estos puntos no suelen tenidos en cuenta a la hora de evaluar el resultado de la entrevista, pero sí le evitan al entrevistador un esfuerzo extra para poder hacer su trabajo. Al final del día, que la experiencia sea lo más placentera posible ayuda a ser recordado más positivamente.

Entrevistas en persona

Después de las entrevistas a distancia, las dos empresas más grandes me invitaron a hacer entrevistas en persona en sus oficinas con todos los gastos pagos.

Primero viajé a Estocolmo, y una semana después a Ámsterdam. En ambos casos me hospedaron en hoteles cerca de la oficina y tuve dos entrevistas a la mañana y dos a la tarde, separadas por un almuerzo con empleados de la empresa. Dos de las entrevistas fueron técnicas; una más general, y una enfocada en situaciones particulares del día a día de cada empresa. Otra entrevista fue aptitudinal, más enfocada en aspectos personales y cómo enfrento los problemas y situaciones difíciles. Y la última para confirmar que entendía cómo funciona el negocio de cada compañía, cómo generan ganancias, y cómo tomar decisiones que puedan afectar esas ganancias.
Obviamente aproveché los viajes para recorrer y disfrutar de las ciudades.
En Ámsterdam además visité las oficinas de la empresa más chica para hablar en persona con su gerente de tecnología.

Image
Image

Ofertas de trabajo

Mi plan era completar el proceso de selección con las tres compañías, conseguir que la tres me ofrezcan un trabajo, y elegir la que me haya resultado mejor. Pero me encontré con un detalle que no había tenido en cuenta: la financiera de Estocolmo me hizo una oferta para el puesto el día siguiente a las entrevistas, exigiendo una respuesta en 48 horas. Eso claramente arruinaba mis planes, porque las entrevistas en Ámsterdam eran una semana más tarde.

Estiré la situación todo lo que pude, pero cuando estaba ya en los Países Bajos, exactamente el día anterior a la entrevista, recibí una llamada desde Estocolmo pidiendo una repuesta o perdía mi oportunidad. Suecia no nos atraía tanto y, a decir verdad, para este punto ya me había enamorado de Ámsterdam, así que decidí arriesgarme y rechazar la oferta, apostando todo a que iba a conseguir un puesto en Ámsterdam.

Hice las entrevistas lo mejor que pude, fue un día de lo más intenso. Esa noche no tuve ninguna novedad, y al día siguiente cuando estaba en el aeropuerto esperando mi vuelo de vuelta a Buenos Aires recibí un correo ofreciendome una posición en la compañía.

Unos días después también recibí una oferta laboral de la empresa más pequeña, pero en este punto ya no había mucho que pensar. El salario y la ayuda para la relocación que me ofrecían eran muy diferentes. Cuando aterricé en Buenos Aires la decisión estaba practicamente tomada, sólo quedaba la formalidad de hablarlo con Agus, que estaba completamente de acuerdo.

En este momento supimos que todos los meses de esfuerzo y nervios habían valido la pena, y nos asaltó el sentimiento de que esto estaba pasando, de repente todo era real. Nos íbamos a mudar a Ámsterdam, la ciudad de la que nos enamoramos locamente.
Al día siguiente acepté formalmente la oferta. El siguiente paso fue empezar a conseguir los papeles para tramitar la visa de trabajo, y comenzamos la enorme tarea de organizar la mudanza al otro lado del Atlántico – esta parte merece su propio artículo, así que más adelante les vamos a compartir esta experiencia.

Traté de cubrir todas las preguntas que recibí en estos últimos meses, pero si hay algo que pueda agregar para hacer este artículo más útil, dejanos un comentario o mensaje. Y si sabes de alguien que lo pueda encontrar útil o interesante, no dudes en guardarlo en los marcadores, compartirlo con tus amigos y contarle a tus vecinos.

Copyright © 2024 Momento de Viajar. All rights reserved.